En el encuentro 4, le apostamos a realizar una valoración cualitativa y la conformación de los colectivos transformadores. Luego de este proceso el equipo se replegó a realizar un análisis de la información y a consolidar la ficha de valoración por cada establecimiento educativo y por cada municipio. Cerramos esta fase con un taller de realimentación de los resultados con cada comunidad educativa, y a nivel municipal implementamos el taller de Valoración municipal sobre el estado del derecho a la educación.
Es importante mencionar que en los encuentros con las comunidades educativos se hizo un despliegue inicial del abordaje de la sostenibilidad, relacionada con lograr identificar qué aspectos iniciales se reconocen de la ISA, de su quehacer empresarial y de su modelos de sostenibilidad.
En términos de resultados, la fase de valoración arroja el siguiente panorama nacional en las cuatro dimensiones de la gestión escolar:
Lo que expresan tanto el grafico como el cuadro, permite una visión de la fase de valoración por dimensión y por departamento, así como el consolidado nacional de la fase. En términos generales la dimensión que más alcanza valoración es la directiva con un 65%, y la que menos reporta avance es la dimensión de Familia y comunidad 55%. El promedio nacional de cumplimiento es del 60%, lo que representa una valoración cualitativa de alerta.
Del cuadro resaltamos que en términos regionales efectivamente los resultados de la dimensión familia y comunidad son los más bajos. En lógica departamental Antioquia y Córdoba obtienen los consolidados más bajos, y Santander un 63%, sin dejar de perder de vista que todos son valoraciones muy por debajo de los estándares.
En términos de retos la fase nos muestra: por un lado poder terminar la fase en municipios como San José de Ure y Briceño que iniciaron más tarde la fase. Nos empieza a demandar estrategias para generar mejores niveles de participación de los diferentes actores de las comunidades educativas; adicional nos empieza a insertar en la definición e implementación de la línea de trabajo en la estrategia municipal. El empoderamiento de la comunicación y de los colectivos transformadores, como fuerzas únicas para consolidar los procesos transformadores y de mejoramiento de la calidad educativa en cada territorio.